A veces los retos de los interioristas rozan lo imposible. Me encontraba con un piso muy deteriorado con instalaciones que había que renovar y un presupuesto muy reducido. La vivienda era para alquilar, así que tenía que ser muy funcional y con materiales resistentes. Pero también quería que resaltase en el mercado inmobiliario y eso se hizo con mobiliario y detalles decorativos que realzaron el resultado final.
Hoy por hoy hay muchos inversores que quieren optimizar su inversión al adquirir viviendas viejas, reformar y decorar para destinarlo al alquiler. Una buena reforma revaloriza sustancialmente la vivienda, reduce el tiempo de alquiler y sobre todo da acceso a clientes solventes que valoran un espacio agradable donde vivir.